jueves, 23 de junio de 2011

VxD: Extraña Invasión (1965)

¡Albricias! Estamos nuevamente frente a un feeelm de Emilio Vieyra (Sangre de Vírgenes, Gitano, La Vida Continúa y demás joyas) y otra vez más frente a lo que hemos de denominar cine de género.
Esta vez vamos por el lado de la ciencia ficción, pero eso sí, con una advertencia:
No sé qué opinan ustedes pero para mí ese "un gran esfuerzo de producción" viene a reemplazar un "no nos dio el cuero para que parezca Oklahoma" Pero bueno, ya conocemos a Emilio, es el de las gaviotas vampíricas...
Ahora bien, supongamos que el espectador, ávido de cine de bajo presupuesto, hace caso omiso de la advertencia (nos están avisando que la película se hunde desde el minuto cero) y decide emprender esta arriesgada aventura visual. ¿Qué es lo que ve?
So American!
¡Una típica familia de Kentucky! ¡Qué maravilla de puesta en escena! El problema no es taaaaanto lo que se ve sino lo que se oye. Ejemplo:
¡Ven a tomar la leche, Tommy! (pronúnciese Tchomi)
¿Era realmente necesario que los personajes, que hablan en el más acérrimo español argento, se llamen por sus nombres yanquis? Porque, además, personajes hay muchos y encima trabajan en compañías norteamericanas como la agencia Clearview (pronúnciese Clérviu). No nos olvidemos que estamos en Oklahoma, o quizás Arkansas o por qué no Texas.
La cosa arranca con unos niños jugando sobre unos barriles claramente peligrosos que terminan derramándose sobre un pantano. Poco después, en los televisores del pueblo aparece una extraña interferencia:
Tommy drinking milk while watching T.V.
El padre de la criatura ve a su hijo mirar esas sospechosas rayas y sanciona: "eso no es bueno para la vista" y le apaga la tele. El hombre, llamado Harry (Jarri) trabaja reparando televisores y empieza a recibir muchas consultas.
Por otra parte, un médico encuentra así a su paciente cuando lo visita...
Eddie watching T.V. like a zombie while recovering in bed.
... y al ver las rayas en la tele pone esta cara...
*recalculating*
... y luego de apagar el artefacto, pregunta:
- ¿Qué veías Eddie (Édi)? ¿Qué veías en esas rayas psicodélicas?
- ¿Psicodélicas?
- Ni te diste cuenta que yo estaba aquí.
- Claro que vi que estabas.
- ¿Por qué no me contestaste?
- Creo que estamos en un país libre, ¿no?
Luego de este remate triunfal, el doc empieza a poner en alerta a los habitantes del pueblo, entre ellos a Helen (Jélen), Hal (Jal), George (Shorsh) y Paul (Pol) También está Jameson (Shéimson) pero creo que ese no era del pueblo. Y hablando de extranjeros, como el intríngulis no se soluciona aparece Steve (Estív), de Comunicaciones, que viene a ver qué diantres ocurre.
Steve unsuccessfully trying to save the day.
Se habla de "bloqueo diatérmico" y de "administración del espacio" pero nada. Y mientras el espectador se va familiarizando con la geografía regional que incluye a ciudades como Canyon City (Canionsiti) o Sun Valley (Sanválei) el doctor empieza a hablar de epidemia, pues los niños y los ancianos, que son los que más miran televisión, empiezan a presentar síntomas heavy-metal...
Here comes the estallid!!!
...como romper todo cuando les tocan la tele.
Como esto ya excede todo lo concebible por el homo sapiens, llaman a alguien de Salud y así es como llega la Dra. Conway (Cónguai) gracias a quien nos enteramos que los chicos están bajo un estado de "regresión electrónica" (WTF!) y que ver la tele les produce "una regresión al pasado que los hace felices"
Die Frau Dr. Conway weisst keine Scheiße über Verdrängung*
En fin, finalmente caemos en la cuenta de que NADIE ESTÁ A SALVO y que este estado "similar a la catalepsia" puede deberse a múltiples factores que incluyen: el sulfato de sodio, un componente electrónico parecido al germanio, silicón o metano (también llamado "gas de los pantanos") Y es así como todo remite a esos barriles del principio.
Claro que a todo esto el pueblo ya se convirtió en una turba iracunda que detesta a los "genios de Washington" (Guóshinton) que vinieron a ver qué pasaba (sí, vinieron de Washington) La turba, liderada por un borracho agitador y un misterioso hombre que llama a Steve con síndrome de He-Man gritándole: "¡Yo controlo el poder, el poder es mío!" hacen que técnicas como sobrevolar la ciudad para ver hasta dónde llega la "penetración en la atmósfera" (?) fracasen y que los ¡15! policías del pueblo se queden cortos, así que llega el ejército.
Por suerte, se descubre que la causa de todo es una sustancia "lechosa" que se derramó de los barriles y que fue absorbida por las plantas de los pantanos. Y esto es lo que hace que haya interferencia. ¿No es re lógico?
Queman las plantas y listo.
Ah, y el tipo que llamaba por teléfono era George quien había planeado todo y finalmente se suicida internándose en las llamas.
Si alguno de ustedes está pensando que cómo pudo haber sido George si los barriles los arrojaron los niños que jugaban, no sé, dejémoslo como enigma.
Extraña Invasión llegó a Uds. gracias a...
... from El Palomar with love!
*la doctora Conway no sabe una mierda sobre la regresión.

6 comentarios:

Marie dijo...

un poco me superó ésta
pedí aumento

Ludmila Iara K dijo...

chabón, qué hace el papurri (en su juventud, ahí ya no) de jorge rivera lópez en esta película? voy a tener que verla porque aparece ramiro morán?

el hijo de gaby es... el hijo de gaby es... el hijo de gaby es... *muere*

Fëarandir-san dijo...

Artz Conway weiss Scheisse über Regression

**orgullo**

mge dijo...

Después de Veredicto Final, Difunta Correa y esta, "Shorsh" Rivera López adquiere la categoría de inimputable. Este año creo que sale una en la que actúa él.

Se agradece la valiosa contribución idiomática de Fëarandir-san y de Soledad Pereyra quienes han quedado ya en la historia del VxD

Juan José Prado dijo...

Ésta era la película prometida. Ya no podré sorprenderme con su enigmático final :(

mge dijo...

Hola Mely

Gracias por el aporte!